viernes, 1 de febrero de 2013

Tema No. 16 Las palabras de nuestra lengua: léxico - procedencia



Tema No. 16
Las palabras de nuestra lengua: léxico - procedencia

Indicador de logro: redacta textos coherentes evitando los vicios del lenguaje y utilizando correctamente los tecnicismos.

Creación de palabras
Tomando como punto de partida que las características esenciales de los vocablos o dicciones son la propiedad, la claridad y la pureza, conviene señalar a ésta sobre todo. Y es sabido que a la pureza de un idioma se oponen los arcaísmos, los barbarismos y los neologismos.

Arcaísmo
Arcaísmo es el uso de palabras anticuadas, de voces que ya han quedado atrás en la carrera de los siglos y en el desarrollo literario.
Un idioma, en cualquier país, es un elemento vivo que evoluciona con mayor o menor dinamismo, quedando unos vocablos desusados u olvidados y apareciendo otros, sea para sustituirlos o para responder a nuevas realidades.
Del mismo modo que en un árbol de hoja perenne creemos ver siempre el mismo árbol y no es así, porque en realidad muchas hojas se secaron, cayeron y aparecieron otras nuevas, sin que el árbol haya perdido su esencia y categoría de tal, igualmente ocurre con el idioma.
Así en castellano antiguo encontramos vocablos como magüer, asaz, fazaña, otrosí, que no son utilizados en la actualidad y causarían hoy la misma extrañeza que un individuo vestido con calzas y jubón. Entre los clásicos españoles, el historiador Juan de Mariana era aficionado a los arcaísmos, en cambio, Cervantes se burlaba de ellos.

Barbarismo
Barbarismo es el uso de palabras extranjeras, vocablo tomado de los griegos, que llamaban “bárbaro” a todo aquel que no participara de su cultura.
Paralelamente con las culturas, los idiomas se hacen densos y ágiles hasta morir cuando aquéllas declinan o desaparecen. Tenemos de ello, no el testimonio de las lenguas denominadas muertas, y a las que pedimos de prestado muchas palabras, términos y raíces que en buena parte resucitan y hacen presente su vieja cultura, e incluso formas idiomáticas que han perdido eficacia y virtualidad, sino la pobreza y anemia progresiva del lenguaje.

Neologismo
Un caso particular plantean los neologismos: el empleo de voces nuevas, cuya condición fundamental es la de ser necesarias, y también inteligibles, sonoras y conformes con el idioma. En efecto, la aparición de nuevas técnicas, de nuevos productos, e incluso de nuevas ideas, trae consigo la aparición de nuevos nombres.
Ya hemos visto el caso opuesto de los arcaísmos, palabras correspondientes a objetos e ideas que caen en desuso y que tienden a desaparecer o a usarse solo para evocar el pasado. Transformaciones que demuestran una vez más, tanto los arcaísmos como los neologismos, que el lenguaje es una cosa viva y que se renueva de continuo.
Un neologismo, un vocablo nuevo, se introduce en un idioma debido a la necesidad de dar nombre a nuevos objetos descubiertos o creados por la técnica humana; en este último caso sirven a la ciencia y se llaman tecnicismos. Casi siempre provienen del griego, como telégrafo, termómetro; del latín, como espéculo, coágulo o de ambos a la vez, como televisión o pluviómetro.
Los lexicógrafos puritanos lo han considerado peligroso y corruptor del habla; y por ello, el neologismo ha sido considerado vicio de dicción. Empero, ello no es absoluto: no todos los neologismos corrompen nuestra lengua; pues hay algunos que la enriquecen.
Su vicio consiste en ser innecesarios, por haber en el idioma otras palabras equivalentes, como cuando decimos afiebrado, por calenturiento; enrulado, por ensortijado, anexionamiento, por anexión; etc.
Actualmente se suele decir: recepcionar, por recibir (recepcionó el dinero); aperturar; por abrir (aperturó una cuenta corriente); mandatar, por mandar (mandató a su abogado hiciera tal gestión).
También se usa la dicción accesar en lugar de acceder.
Dentro de los neologismos están, también, los extranjerismos en general, originados en diversas lenguas conocidas:
Concretamente nos estamos refiriendo a palabras como ketchup (originariamente del malayo), sin el cual para miles de jóvenes las papas fritas, e incluso la vida misma, no tendrían sentido; samurái (del japonés, término muy de moda en Chile en estos últimos días en los que han surgido inesperadamente émulos criollos); gurka (del hindi, por suerte, entre nosotros ya en el olvido), anorak (del esquimal), parka (aleutiano), champú (del hindi), bungalow (bengalí), curry (tamil), pijama2 (del hindi, nosotros la escribimos con j, pero la pronunciamos con y, al igual que soja, que viene del japonés).[1]

Tecnicismos
Los tecnicismos son términos o voces técnicas que se emplean en el lenguaje científico y tecnológico. Algunos son de uso generalizado, pero la mayoría son de empleo particular en cada rama de la ciencia. Para conocer el significado de las palabras técnicas es necesario consultar los diccionarios especializados de cada rama del saber.
Todas las voces técnicas empleadas en un arte, ciencia u oficio, reciben el nombre de tecnicismos.
La mayoría de los tecnicismos empleados en el castellano tienen su origen y llevan en su estructura prefijos, sufijos o raíces de origen griego o latino. De acuerdo a la especialidad de la ciencia, arte, o profesión, existe una amplia clasificación de palabras técnicas.

Ejemplos:
1. software (de la Informática): conjunto de programas, instrucciones y reglas informáticas para ejecutar ciertas tareas en una computadora.
2. mononucleosis (de la Medicina): exceso de monocitos en la sangre, debido a ciertos tipos de infecciones.

Neologismo
Un neologismo es una palabra nueva que aparece en una lengua. La creación de neologismos se produce por modas y necesidades de nuevas denominaciones. Por ello hay neologismos innecesarios, como los que alargan las palabras convirtiéndolas en archisílabos, pero también hay otros neologismos necesarios como "bonobús" o "seropositivo".
Hoy en día, los medios de comunicación son los principales propagadores de los neologismos y los préstamos lingüísticos. Algunos de estos términos no son realmente necesarios y tienen una vida efímera. Los neologismos más o menos necesarios avanzan en la dirección de la sociedad cada vez más compleja que necesita denominar nuevos aspectos de las relaciones humanas. Es fácil, pues, incorporar nuevos vocablos en la terminología informática.

Ejemplos de neologismos en informática:
Internet (red de comunicación global)
Chatear (de Chat)
Computadora (Computer)
Ordenador
Servidor (Server)
Clickear (de Click)
Ratón (mouse)
Soportado (supports)
Navegador
Hardware

Arcaísmo
Se llama arcaísmo a toda palabra o expresión que, si bien llegó a ser muy utilizada en el pasado, hoy en día no se usa frecuentemente o ha sido reemplazada por un término nuevo o una variante. En la actualidad perviven algunos arcaísmos en ciertas zonas (sobre todo rurales) de España y en Hispanoamérica.
Un arcaísmo se usa para designar un término léxico o un elemento gramatical que ha desaparecido del habla cotidiana, pero que es usado en ciertos contextos o entendido por los hablantes.
En corto, arcaísmos son palabras que generalmente son incorrectas pero aún son usadas.

Ejemplos:

México
se me hace                               me parece
¿qué tanto …?                         ¿cuánto …?
muy noche                                muy de noche
dizque                                      supuestamente
donde – usado como condicional en expresiones como «Donde se lo digas, te mato» Como se lo digas, te mato

Existen arcaísmos tanto gramaticales como léxicos, algunos ejemplos de arcaísmos léxicos, ya olvidados en España, y que conservan vigencia en México:
pararse                      ponerse de pie
Anteojos                   gafas
platicar                     conversar
prieto                         oscuro
liviano                      ligero
demorarse,                dilatarse tardar, retrasarse
Esculcar                  buscar en el sentido de registrar
luego                        en otro momento
recibirse                graduarse

LA CACOFONÍA
La cacofonía, un vicio de dicción o de la palabra, es el sonido desagradable que se produce por el encuentro o repetición de sílabas iguales dentro de una sola expresión.

EJEMPLOS DE CACOFONÍA
Expresiones incorrectas
1. Está tan atontado que ni nos reconoce.
2. Violeta, ¿dónde lo colocó?
3. La mujer juiciosa y hermosa Rosa fue premiada.
4. Jorge se cayó, yo lo vi.

Expresiones correctas
1. Se encuentra muy aturdido que ni nos reconoce.
2. Violeta, ¿dónde lo pongo?
3. La muy sensata y bella Rosa fue premiada.
4. Jorge se cayó; lo vi.

Barbarismo
Barbarismo, según el punto de vista normativo reflejado en el Diccionario de la lengua española (DRAE) de la Real Academia Española (RAE), «es una incorrección que consiste en pronunciar o escribir mal las palabras, o en emplear vocablos impropios». En lingüística estricta puede corresponder a una forma estigmatizada socialmente, o bien a una innovación lingüística. El concepto de barbarismo puede también incluir extranjerismos no incorporados totalmente al idioma; se trata de un caso particular de barbarismo en su primera acepción.
Los barbarismos pueden ser prosódicos, morfológicos y sintácticos, según afecten a la prosodia, morfología o sintaxis.

EJEMPLOS:
abajar por bajar
accesar por acceder
aereopuerto o eropuerto por aeropuerto
almóndiga por albóndiga
ambos dos por ambos
andé por anduve
astronuata o astronata por astronauta
bayonesa por mayonesa o mahonesa
bisted por bistec
captus por cactus
Cóa Cola por Coca Cola
cocreta o crocreta por croqueta
comisería por comisaría
cóptel por cóctel
cuete por cohete
custión por cuestión
delicuente por delincuente

Solecismo
Del Latín soloecismus: que habla incorrectamente. Falta que consiste en emplear habitualmente al hablar una palabra o expresión incorrecta o sintácticamente mal construida, Participio

EJEMPLOS DE SOLECISMOS:
Les llevé a pasear, en vez de, los llevé a pasear.
No me recuerdo, en vez de, no me acuerdo.
Cuanti más mejor, en vez de cuanto más mejor.
En base a lo siguiente, en vez de con base en lo siguiente.
Tengo gripe, en vez de ten.

Coloquialismos
Es la lengua que empleamos entre amigos, familiares o personas cercanas a nosotros. No es formal, sino una manera de hablar más rápida, con expresiones populares. Entre las personas que no tenemos confianza usamos la lengua formal, que es más cuidada.
Un error muy frecuente es el uso de "Deber" y "Deber de", ya que significan "obligación" y "probabilidad" respectivamente. Por ejemplo:
-Deben​ ser la una. (MAL)
-Debe de ser la una. (CORRECTO)
-Debes estudiar para el examen. (CORRECTO)
-Debes de estudiar para el examen. (MAL)
Otro error muy frecuente es "Mientras que" y "De mientras que", siendo el último, el incorrecto.

A continuación, varias frases coloquiales que se dicen con bastante frecuencia:
-"Estar al loro": estar atento, pendiente de algo.
-"Ser la leche": destacar en algo, ser el mejor.
-"Estar niquelao": estar muy bien acabado.
-"Buscar las 5 patas al gato": buscar algo imposible.
-"Eso es así": afirmación rotunda. -"De la patada": algo sale pésimo. Ej.: "Las cosas me salieron de la patada". -"[2]

Actividad sugerida: redacta textos coherentes evitando los vicios del lenguaje y empleando tecnicismos.


[1] http://www.profesorenlinea.cl/castellano/BarbarismosNeolo.htm
[2] http://comentariotextosselectividad.wikispaces.com/Coloquialismos.

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